Muros

Cuando en X-Men, Heroes o toda serie/película basada en unos pocos elegidos con habilidades extraordinarias los protagonistas son aquellos con los poderes más inmediatamente sorprendentes al ojo mortal - regeneración de tejidos, telepatía, telequinesis y habilidad para controlar el fuego-, yo decido que, si un día me veo escribiendo una historia de ficción (¿O basada en una historia real? ¿Por qué no? El ADN tiene esa loca tendencia a mutar), el poder envidiable, el más poderoso y el envidiado por incluso los mutantes que pueden cambiar de forma será el de tener la habilidad de construir y tirar abajo muros mentales de protección psíquica, y no sólo eso, si no tener además el criterio para saber cuándo es necesario; Cuándo conviene cerrar los ojos, protegerse y no sentir nada. Cuándo conviene arriesgarse y dejarlo caer.


Hasta aquel momento, acá sigo, mirando las nubes entre 4 paredes de ladrillo, hasta que alguien con superfuerza venga a derribarlas.